El Ácido Glicólico es un alfa hidroxiácido (AHA) derivado de la caña de azúcar.
En su presentación en crema y gel en concentraciones del 8 al 15% brinda un progresivo efecto peeling que favorece la renovación celular y la disminución de arrugas y manchas aportando luminosidad a la piel.
La línea se completa con Detenage® G Serum Anti-Imperfecciones, ideal para pieles mixtas a grasas o con pequeñas imperfecciones, con Ácido Glicólico al 3%, Niacinamida 2% y Ácido Salicílico 1,5%, en una fórmula de triple acción: exfolia suavemente favoreciendo la renovación celular, regula el exceso de sebo y ayuda a mantener la hidratación, con una excelente tolerancia incluso en pieles sensibles.
Aplicar durante la rutina de noche sobre la piel
limpia y seca del rostro, cuello y escote
masajeando suavemente en forma circular
y ascendente hasta que el producto se absorba.
Aplicar durante la rutina de noche sobre la piel limpia y seca del rostro, cuello y escote masajeando suavemente en forma circular y ascendente hasta que el producto se absorba.
Es recomendable comenzar con una concentración de ácido glicólico al 8%. Esta concentración es óptima para exfoliar la piel sin causar irritación, especialmente para pieles que no están acostumbradas.
La clave al comenzar a usar ácido glicólico es hacerlo de forma gradual. Al principio, se debe aplicar una o dos veces por semana para que la piel se acostumbre. Observa cómo reacciona tu piel; si no presenta signos de irritación como enrojecimiento, sequedad excesiva o descamación, podés aumentar la frecuencia gradualmente.
El ácido glicólico se utiliza por la noche, ya que puede aumentar la sensibilidad de la piel al sol. Durante el día es imprescindible usar protector solar con un FPS 50.
Después de varias semanas de uso, si la piel tolera bien el ácido glicólico, se puede considerar el uso de concentraciones más altas, de 10 a 15%.
Recordá siempre consultar a tu médico dermatólogo.
Es recomendable comenzar con una concentración de ácido glicólico al 8%. Esta concentración es óptima para exfoliar la piel sin causar irritación, especialmente para pieles que no están acostumbradas.
La clave al comenzar a usar ácido glicólico es hacerlo de forma gradual. Al principio, se debe aplicar una o dos veces por semana para que la piel se acostumbre. Observa cómo reacciona tu piel; si no presenta signos de irritación como enrojecimiento, sequedad excesiva o descamación, podes aumentar la frecuencia gradualmente.
El ácido glicólico se utiliza por la noche, ya que puede aumentar la sensibilidad de la piel al sol. Durante el día es imprescindible usar protector solar con un FPS 50.
Después de varias semanas de uso, si la piel tolera bien el ácido glicólico, se puede considerar el uso de concentraciones más altas, de 10 a 15%.
Recordá siempre consultar a tu médico dermatólogo.
Fomenta la renovación celular respetando la función barrera de la piel.
Su acción exfoliante ayuda a suavizar la textura de la piel.
Ideal para prevenir arrugas y signos de envejecimiento.
Contribuye a eliminar el exceso de sebo y mejora las cicatrices.
Estimula la síntesis de colágeno y elastina.
Unifica el tono.
Fomenta la renovación celular respetando la función barrera de la piel.
Su acción exfoliante ayuda a suavizar la textura de la piel.
Ideal para prevenir arrugas y signos de envejecimiento.
Contribuye a eliminar el exceso de sebo y mejora las cicatrices.
Estimula la síntesis de colágeno y elastina.
Unifica el tono.
Fomenta la renovación celular respetando la función barrera de la piel.
Su acción exfoliante ayuda a suavizar la textura de la piel.
Ideal para prevenir arrugas y signos de envejecimiento.
Contribuye a eliminar el exceso de sebo y mejora las cicatrices.
Estimula la síntesis de colágeno y elastina.
Unifica el tono.
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